Todo viaje llega a su fin. Todo recorrido llega a su final. Es parte de la vida, comenzar y acabar lo comenzado. Y un día como hoy, acaban mis vacaciones, así que de vuelta a la rutina.
Generar pensamientos gasta tanta energía, pero difícil es darse cuenta de ello y más aún, detener por completo esa incansable máquina generadora de pensamientos que parece que nunca para, ni aunque estés de vacaciones. ¡Unas vacaciones mentales caerían de película!